Tener un huerto familiar implica un gran esfuerzo; claro está que sin lugar a dudas vale la pena, pues los frutos no solo se resumen a las hortalizas que obtendremos en nuestra propia casa, sino también a la unión familiar que poco a poco se va logrando, mientras cultivamos la tierra.
Yo se la importancia que se da a un huerto escolar, y veo los beneficios que aporta, pero ¿ por qué no tener un huerto familiar y obtener esos beneficios dentro de casa?.
Yo personalmente, hace unos meses, llegué a la decisión de hacer un huerto casero en el patio de mi casa con mis peques. La verdad que es una gran experiencia , donde he podido comprobar lo que les llama la atención regar, ver crecer las plantas, y nuestras 3 primeras guindillas han causado admiración.
Así que decidimos plantar guindillas, berenjenas, pimientos rojos, tomates, limonero, y la verdad que nos ha encantado la experiencia. Iremos ampliando nuestro huerto familiar.
Y si aún no te convence la idea, te invito a leer los múltiples beneficios que esta actividad otorga:
- Pasas más tiempo con tu familia y fomentas la vida al aire libre. Al ser un proyecto familiar, todos pueden hacer pequeños aportes que contribuyan al éxito del huerto. Los más pequeños pueden ayudar removiendo malezas, regando, cosechando, plantando y todo lo que se necesite, pues son actividades que no representan peligro para ellos.
- Ahorras dinero. Comprar semillas en grandes tiendas resulta muy económico comparado con todos los frutos que puedes llegar a producir.
- Comes sano y fresco. Poco a poco tus hijos se interesarán por comer una mayor cantidad de frutas y verduras frescas, recién cosechadas por ellos mismos.
- Responde algunas dudas de tus hijos. Los niños son muy curiosos y siempre están dispuestos a aprender. Dejar que vean por ellos mismos todo el proceso de crecimiento de las frutas y verduras será una actividad educativa muy interesante.
- Te relaja. El contacto con la tierra es una de las cosas que se hacen en silencio, por lo que también te ayudará a encontrar un minuto de paz y conexión contigo mismo, lo cual no sólo les beneficia a ellos, sino que la verdad a mi personalmente, me relaja.
- Experimentas la satisfacción del trabajo en equipo. El día a día parece cada vez más rápido, es por este motivo que observar lo que lograron hacer como familia, con sus propias manos y esfuerzo, dará aún más unión y amor a tu familia.
- Puedes adaptarlo a tu espacio. No hay excusa que valga para no hacer un huerto familiar. Pues puedes hacerlo de diferentes tamaños, circunstancias y según el espacio con que cuentes, siempre adaptándolo a las reales necesidades de tu familia. Yo personalmente, no he podido hacer un gran huerto, pero seguro que iremos ampliándolo.
Pero claro, este es un pequeño huerto, así que decidí llevarles al huerto de un familiar muy querido, y la verdad que les encantó ver que aquellas pequeñas plantas que tenemos en casa , allí hay muchísimas, así que conocieron mis peques la huerta a través de la experiencia de la abuela Pascui, que desde muy pequeña ya ayudaba a su padre en la huerta, el abuelo David, y la abuela Isabel.
Hay un cuento , que personalmente me gusta mucho, y que podeís contarselo a vuestros peques, es el de JAIME Y LAS BELLOTAS de la editorial Kalandraka.Leerlo con vuestros peques que les encantará.
Disfrutar con vuestros peques de este maravilloso cuento, y de la experiencia de tener un huerto familiar.
Alicia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario